La crisis sanitaria, trajo consigo una serie de secuelas. La funcionalidad de algunas personas se vio afectada, llegando incluso a limitar su autonomía debido a la pérdida de memoria y otras habilidades cognitivas que van interfiriendo en su vida cotidiana.
Atentos a esta realidad que proliferó en la pandemia, es que el Hospital base de Castro implementó un nuevo programa de atenciones preventivas y de intervención a pacientes que poseen deterioro cognitivo moderado y severo, liderado por la neuróloga, Dra. Lorena Morante Mejía.